Siguen pasando los años y más tengo que darme la razon en uno de los artículos que escribí en este Blog hace ya algún tiempo cuando dije que el porcentaje de practicantes que no ponen la mano en corazón de la pala, que técnicamente están todos cortados por el mismo patrón o que las empuñaduras no son las que tienen que ser puede ser del 80%... El pádel no para de crecer, cada vez son más practicantes, pero el jugador principiante es exactamente el mismo.
El pádel es un deporte que tiene una serie de características propias y por eso todos lo que empiezan a practicarlo y no vienen del tenis, adquieren una serie de "manías" o "defectos", como decía, propios de este deporte.
Si te fijas en la pista que tienes al lado cuando estás jugando o vas a jugar, verás como casi todo el mundo tiene las misma "taras técnicas".
Soy de los que he evolucionado algunas de mis ideas a lo largo de estos años, pero ésta en concreto no sólo no ha cambiado sino que la defiendo con mucha más energía.
El pádel es un deporte en el que se comenten los mismos fallos técnicos independientemente de la edad o el sexo...
Empuñaduras muy de derecha, muy de revés, mano no dominante mal colocada sobre la pala, no uso de esta mano en las ejecuciones de los golpes, posiciones de frente tanto en el fondo como en la volea, armados cortos en la derecha, terminaciones forzadas hacia abajo en derechas, en la espalda en los reveses, inexistencia de retención de la mano no dominante en los reveses a la hora de ir al impacto de la pelota...
Todo lo anterior supuso, junto conmi idea (porque así se puede comprobar) de que los monitores, profesores o entrenadores no insisten en corregir todos estos aspectos, para mí tan importantes como utizar la pala para jugar surgió #exigetécnicaatuprofe...
Un hastag que dice mucho más que sus cinco palabras.
