Buenas a todos. Ya sabéis que
siempre hablo de lo importante de la técnica. Que si la mano izquierda tiene
que estar en el corazón de la pala, que si tiene que haber tensión entre las
dos manos en el revés para que se produzca la fuerza que se necesita en el
golpe…
En esta ocasión quiero
hablaros de estas mismas cosas pero con dos ejemplos que creo que valen para
todo practicante y sobre todo para los docentes que enseñan a los más pequeños.
Desde que empecé a tener
relación de nuevo con el pádel de menores no he podido encontrarme muchos
jugadores y jugadoras que tuvieran unos golpes técnicamente correctos en
general. No me entendáis mal. No quiero decir que los chicos y chicas que se
dedican a jugar el circuito de menores no tengan buenos golpes, pero sí que me
extraña que siendo deportistas que viajan, que se suponen que tienen unos
objetivos a nivel competitivos diferentes que al usuario de club, tengan carencias en su base. Por suerte cada vez se
ven más jugadores con buenos gestos que a su vez se transforman en buenos
resultados. Sus entrenadores tendrían que hacer una reflexión acerca de si lo
que les están enseñando va por el buen camino o no.
Como decía antes, quiero
acercaros dos ejemplos de lo que para mí es difícil de encontrar. No quiero
decir que sean las únicas jugadoras de todo el circuito de menores que lo
cumplen, pero sí las que, precisamente, por cumplirlo, son un referente tanto
en juego como en resultados.
Son Marta Ortega y Ariana
Sánchez. La primera jugadora de Madrid y la segunda catalana…
Desde hace años me llamaron la
atención sobre su forma de jugar. Ya no sólo hablamos de que técnicamente no
tienen nada que ver con la mayoría de jugadoras si no que tácticamente tienen
muy claro qué es lo que tienen que hacer dentro de una pista.
Tengo la suerte de que no sólo
las veo jugar en competiciones de menores, sino que también las veo en los por
equipos o en competiciones open, todo ello en categoría absoluta. Sus golpes,
la elección de lo que tienen que hacer en todo momento, su colocación en la
pista y sus ganas de ganar son características de las dos.
Las pongo como una referencia
en el pádel de menores y sobre todo en chicas porque llevan años ganándolo todo
con bastante facilidad. La diferencia que existe entre ellas y el resto de
chicas es bastante grande.
Marta Ortega… Jugadora de
derecha que se caracteriza por un juego lleno de velocidad y activación de
piernas. No da ninguna bola por perdida y la he visto en partidos relativamente
cómodos enfadarse porque había fallado una bola cómoda en la red de derecha. Hasta
este punto su nivel de exigencia es alto. Siempre se está pidiendo el máximo en
los partidos, independientemente del nivel de las rivales.
En defensa juega muy bien a cambiar la velocidad de la bola para poder contraatacar y “tirarse” a por la contraria. Juega bolas con poco peso para que las contrarias voleen hacia arriba y ahí poder tener tiros ganadores. En este tipo de juego se compenetra muy bien con Ari que le lee la jugada y la acompaña en el ataque. Tiene una bandeja bastante buena que le permite pegarse a la red en la siguiente bola y tener prácticamente la opción de ganar con su siguiente volea. El remate lo tiene técnicamente muy correcto y eso se nota a la hora de mover los pies, ajustarse para flexionar las rodillas y salir con mucha explosión hacia la pelota consiguiendo impactar a la bola lo más arriba posible y con ello traerse la bola con altura sin que tengan las rivales opción a llegar.
Ari… es una jugadora que me gusta mucho por la tranquilidad con la que se le ve colocarse y moverse en su zona de defensa (jugadora del lado de ventaja). Nunca se la suele pillar en zona de nadie. Tiene buena mano para sacarse voleas de los pies desde mitad de pista o bote-prontos tanto de derecha como de revés. También suele jugar bolas con poco peso para ir al contraataque. Domina mucho con la volea de revés a la verja y su volea de derecha le hace facturar muchos puntos casi a cualquier lado que tire. La bandeja la tiene para prepararse para la siguiente pelota y poder dominar con una volea de derecha. Tiene una técnica en el remate más propia para los tres metros ya que se arquea muy bien para este tipo de golpe.
Después de esta descripción de
su juego, lo que más me gustaría resaltar, y para eso es este artículo, es que
son de las pocas chicas (y repito que no son las únicas) que técnicamente
tienen golpes tan correctos que el abanico de golpes que tienen les permite
dominar claramente al resto de chicas con las que se topan en los torneos.
Cuando veo a los
benajmines/as, alevines/as e infantiles veo que hay un gran agujero técnico en
general. Supongo que los entrenadores permiten que puedan jugar con empuñaduras
de derecha (un tema de fuerza) y reveses a dos manos con la misma empuñadura
que de derecha limitando sus tiros y no evolucionando técnicamente.
Los errores más repetidos en
estas categorías son:
- Malas empuñaduras.
- Reveses a dos manos con empuñadura de derecha.
- Muñequeos en los golpes de derecha (tanto en la
volea como en el fondo).
- El revés plano a una mano no existe (la
empuñadura de derecha no les deja esta opción) haciendo sólo el revés cortado o
el plano/liftado con las dos manos.
- Bandeja con la preparación ya detrás de la nuca
y con la cara de la pala con la que van a golpear mirando al cielo.
- Problemas en las bolas bajas de derecha (la
empuñadura de derecha no deja meter bien la pala por debajo de la bola)
- Voleas de revés a dos manos y rotura de muñeca.
- La mano izquierda no suele estar bien colocada
en el corazón de la pala con lo que los errores de revés de acentúan mucho más
y existe mayor descontrol de la direcciones y velocidad.
Podría seguir con un montón
más, pero este es un artículo de Marta y Ari y ellas son el ejemplo más claro
de cómo hay que tener la base técnica de todos los golpes.
Si alguna vez tenéis ocasión
de verlas jugar, ya sea juntas o por separado, cada una en sus circuitos, no
perdáis la oportunidad…